-¿Sabe por qué la juventud está descontrolada con el alcohol? Porque no existe más la resaca
-¿Si?
-Hoy ellos tienen remedios milagrosos. Beben y no sienten nada. La química acabó con la resaca.
-¿Y la resaca de las Drogas?
- La droga no da resaca. Mata, pero no da resaca. Por lo menos una resaca como las nuestras. Una resaca clásica. Recuerda.
- No me hable
- Bebíamos sabiendo que al día siguiente estaríamos en el infierno. Por eso las borracheras tenían una grandeza moral que ya no tienen. Desafiábamos al cielo y a sus furias: náuseas, acidez, dolor de cabeza, vómitos, deseo de muerte.
La resaca era la prueba de que el escarmiento divino existía y que todo placer lleva consigo un castigo. Nos daba una noción de pecado, de culpa, y de correcta proporción.
- Nosotros sobrevivimos a todos esos castigos
- No sólo sobrevivimos sino que también nos dio carácter. Un sentido ético, una comprensión de las limitaciones humanas una base filosófica para comprender la muerte. Lo que no es poca cosa a cambio de un hígado.
